Um trecho do beijo

Texto CONCEBIDO EM CAMPINAS [SP/BRA] 1988-1989

Argollo Ferrão, A. M. de (1987). Um trecho do beijo [web]. Disponível em <http://argollo.org/tri/tri1/tri1-72/>.

ISBN 978-85-908725-1-1 / PUBLICADO EM 2008

Argollo, A. (2008). Um trecho do beijo. In A. M. de Argollo Ferrão (Ed.). Ver a Cidade (pp. 63-64). Campinas [SP/BRA]: O Autor.

ISBN 978-84-936996-0-4 / TRADUZIDO PARA O ESPANHOL E PUBLICADO EM 2009

Argollo, A. (2009). Un tramo del beso. En A. Argollo. Ver la Ciudad. Un guión poético con ojos de veracidad (p. 102) (Colección Caravasar) (M. A. Suárez Escobio, Trad.). Gijón [Asturias/ESP]: CICEES. (Original en portugués publicado en 2008).

Um trecho do beijo

Estavam os dois sentados num belo gramado. Só os dois, sós a dois. De repente ela o olha com ímpar expressão de meiguice nos olhos, esconde um sorriso malicioso e diz: – te amo (ela realmente o amava)… Ouvindo isso, ele se debruça sobre ela e a beija.

(…) O beijo…

Formavam um par “ímpar”. Nunca haviam se beijado, nunca haviam se tocado, mal haviam se falado mas se conheciam muito bem. Amavam-se há séculos. Ele esperava por ela e por esse momento há uns 258 anos. Ele a amava muito. O beijo foi tão intenso que o mundo parou por alguns instantes… …………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………….. O texto parou, o poeta parou, o tempo parou. Tudo literalmente parado por infinitos 258 segundos. Depois que se encontraram, depois que se beijaram o mundo não ficou mais como era antes. Todos os fumantes apagaram seus cigarros, as chaminés das fábricas, os carros apagaram suas fumaças. Acabou a poluição. A água voltou a fluir pelos rios, voltaram os peixes e as margens – a vida voltou aos rios. As florestas voltaram a ter árvores. Acabou a poluição. As crianças abandonadas, desarmadas, passaram a sorrir ao se sentirem amadas. O amor desarmou o rancor. Acabou a violência. O mundo mudou depois do beijo: a sujeira das ruas, a sujeira das almas… A sujeira acabou. O mundo ficou diferente. O beijo o mudou. O beijo mudou-os e eles mudaram o mundo. Aquele encontro significou mudança. Foi marcado pelo destino. Um momento esperado com angústia, apreensão, medo de que a espera fosse em vão. Mas aconteceu! Foi um beijo inesquecível e o mundo nunca mais voltou a ser o que era antes.

Un tramo del beso

Estaban los dos sentados en un bonito césped. Solos los dos, solos a dos. De repente ella lo mira con una singular expresión de dulzura en los ojos, esconde una sonrisa maliciosa y dice: – te quiero (ella realmente lo quería)… Oyendo eso, él se vuelca sobre ella y la besa.

(…) El beso…

Formaban un par “ímpar”. Nunca se habían besado, nunca se habían tocado, apenas se habían hablado pero no se conocían muy bien. Hacía siglos que se querían. Él la esperaba y esperaba ese momento hacía unos 258 años. Él la quería mucho. Él beso fue tan intenso que el mundo se detuvo durante unos instantes… ………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………. El Texto se detuvo, el poeta se detuvo, el tiempo se detuvo. Todo se detuvo literalmente por unos infinitos 258 segundos. Después de encontrarse, después de besarse, el mundo ya no fue como antes. Todos los fumadores apagaron sus cigarrillos, las chimeneas de las fábricas, los coches, dejaron de expulsar sus humaredas. Se acabó la contaminación. El agua volvió a fluir en los ríos, volvieron los peces y las orillas – la vida regresó a los ríos. Los bosques volvieron a tener árboles. Se acabó la contaminación. Los niños abandonados, desarmados, comenzaron a sonreír y se sintieron amados. El amor desarmó el rancor. Se acabó la violencia. El mundo cambió después del beso: la suciedad de las calles, la suciedad de las almas… La suciedad acabó. El mundo se convirtió en algo diferente. El beso lo cambió. El beso los transformó a ellos y ellos transformaron el mundo. Aquél encuentro significó un cambio. Fue concertado por el destino. Un momento esperado con angustia, con aprensión, con miedo de que la espera hubiese sido en vano. ¡Pero sucedió! Fue un beso inolvidable y el mundo nunca volvió a ser lo que era antes.